Un hombre de raza negra y origen subsahariano ha destrozado a pedradas la puerta de un supermercado en Ruescas (Almería) para intentar agredir a la tendera, a la que ya habría amenazado anteriormente según ha denunciado la propia víctima. El hombre ya ha sido detenido.
La primera vez que Manzon vio a Almudena fue en el supermercado que la familia de la joven tiene en Ruescas, una pedanía de Níjar, en Almería. Allí trabaja como dependienta. "Regala mujer, regala mujer", le dijo al padre de Almudena... y todos se lo tomaron a broma.
Buscaba llamar la atención de Almudena como fuera. A veces lo hacía con golpes, a veces alzando la voz. "Solía tirarme el dinero para pagar", cuenta la joven. La situación cada vez iba siendo más incómoda. "Yo temblaba cada vez que lo veía", dice Almudena, y lo veía con relativa frecuencia.
Amenazas
"Un día cambio el chip", dice la joven. Ese día no se lo encontró en la tienda sino en la calle. Almudena paseaba con su hijo de nueve años cuando Manzon se abalanzó sobre ellos y empezó a amenazarles. "Decía que me iba a matarme a mi y a mi hijo", cuenta a NIUS, "menos mal que mi hijo salió corriendo a avisar a mi padre".
Almudena ha explicado que se trata de “un vecino de la barriada” que era cliente de la tienda: “Venía, siempre compraba alcohol y en ningún momento trae buenas intenciones. Siempre estaba diciendo que quería mujeres, hasta que mi padre le dijo que no y fue cuando se abalanzó sobre mí en la calle y me dijo que me iba a matar, que tenía un machete y que me iba a matar”
Al parecer, el atacante estaba “obsesionado” con Almudena. Tras golpear varias veces la puerta con la piedra y con mucha violencia, consiguió entrar y un hombre logró quitarle el arma improvisada de la mano. “Fue un terror horrible. Solo pensaba en mis niños y en mi familia. Venía a matarme”, ha asegurado. También ha contado que uno de los pequeños, de 9 años, tiene miedo de ir a la calle y al colegio por lo sucedido.
La víctima no solo quiere una orden de alejamiento, sino que el hombre no quede en libertad: “Si no me mata a mí, va a matar a otra persona”, ha finalizado.