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3 de noviembre de 2013

Los oenegetas nos maltratan psicológicamente

"El 20 % de la población mundial consume el 80 % del agua..." y lemas parecidos; imágenes de miseria de otros países y de opulencia en el nuestro....
Es la cantinela diaria con la que estos sinvergüenzas nos maltratan psicológicamente a diario. Sí. Nos maltratan psicológicamente y a diario.
En Occidente se nos ha inoculado en el subconsciente colectivo que somos malos, explotadores, derrochadores y tenemos que pagar. Pagar para expiar nuestras culpas. Pagar porque tenemos que pagar. Como tenemos que aceptar la inmigración, destinar dinero a otros países a modo de "impuesto revolucionario".
Ojo, que me parece muy bien la solidaridad. Pero cuando la solidaridad se exige, se impone, deja de ser solidaridad para ser CHANTAJE y EXTORSIÓN. Las que nos hacen los países menos desarrollados para que no se enfaden. Las que nos hacen las ONGs recordándonos lo malos que somos.

Como si nuestra "prosperidad" nos hubiera caído del cielo. Anda que no ha habido guerras, hambre, enfermedades en los países occidentales, para que ahora se crean por ahí que nos ha caído del cielo o que se lo hemos robado al "tercer mundo".
Mucho trabajo: físico e intelectual es lo que ha habido. Europeos que se han dejado los sesos creando, investigando...humildes campesinos que han trabajado de sol a sol, mineros que quemaron sus pulmones en las minas. Y no estoy hablando de hace siglos.

Debemos despertar y superar el trauma que nos han inoculado en el subconsciente. No somos culpables de las desgracias del mundo, aunque se esfuercen en hacerte creer que sí. Para que les pagues una cuota (a modo de modernas bulas laicas).

Y es que las ONGs...
Sí son gubernamentales:
Organizaciones NO gubernamentales, que son precisamente de todo menos independientes. Las hay que casi no tienen ni afiliados y viven casi exclusivamente de la subvención del Estado.
Las hay corruptas:
Los medios de comunicación nos han revelado en más de una ocasión, diversas malversaciones de los dineros de todos.
Funcionan como un negocio:
Ya he visto en mas de una ocasión ofertas de trabajo donde se buscaban colaboradores a modo de comerciales que te venden un producto. El comercial se queda una comisión. El jefe otra...y así sucesivamente, para que al final no quede casi nada para el fin original.
El producto se vende porque hay una necesidad. El occidental cree que es culpable de las desgracias del mundo y quiere resarcirse, dormir más tranquilo. Y el occidental compra tranquilidad. Y al igual que las lechugas le son pagadas al agricultor a precio de risa para llegar a su precio desorbitado en el mercado, gracias a los intermediarios, aquí pasa igual. Es el proceso inverso. Pagando el occidental una cantidad, de la que llega una mínima parte al que lo necesita. Los intermediarios (los oenegetas) se quedan con el grueso del dinero.

Las hay incluso que tienen objetivos políticos claros y nítidos: perseguir a un determinado colectivo por su ideología. Y encima se presentan como los adalides de la tolerancia...y lo peor de todo ¡reciben dinero por ello!

¿Y la Fiscalía anticorrupción que opinará de todo esto?
¿O habrá que crear una Fiscalía que investigue a la Fiscalía anticorrupción?

ONGs: organizaciones no gubernamentales que sí dependen del gobierno, funcionan como negocios, a modo de modernas iglesias laicas expendedoras del perdón a cambio de la bula del malvado occidental.
ONGs: algunas corruptas y otras rostro "amable" del antifascismo callejero.
ONGs que nos maltratan psicológicamente.
 

Nótese que la Ley de vagos y maleantes aquí expuesta es de la Segunda República. Sí. De la Segunda República. Del de después no. De la Segunda  República.
 

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